Una máquina del futuro

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Se me escapa la vida


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Se me escapa la vida como un globo de feria. Se aleja despacito sin poder hacer nada. Quisiera volver a lo más básico, y ver las cosas como son y no como las veo. Quisiera un cubo y un rastrillo, mancharme y reírme porque sí.

Espero algún día, poder alcanzar el hilo atado a mi globo.

Robot

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Cine paralelo


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Llevo media cerveza mirando incesantemente a aquella chica, sentada en la mesa del fondo. No podría decir con certeza en qué momento ha dejado de ser realidad para convertirse en butacas de primera clase.

Estoy viendo una película en monótono rojo, y ella es la protagonista de una escena pasional en mi contexto romántico, pisoteado y abandonado. En forma de travelling todo es belleza, desde los extremos de sus dedos, que se tocan en la punta agazapados alrededor de una taza de café, hasta el extremo de su cuello que como si de un busto se tratase, ensalza su perfil clásico.

Pero su mirada es gris en mi monótono rojo y es que su butaca es de otra sala, allí proyectan en blanco y negro a través de la ventana. La pareja protagonista camina abrazada por la acera cobijándose bajo el paraguas de la lluvia incesante; él lo sujeta caballeroso y protector, ella le pasa la mano por detrás de la cintura en una escena romántica en su contexto melodramático, pisoteada y abandonada.

Volviendo a la realidad pienso que si ella es ciega y yo soy mudo, nunca veremos la misma película. Y es por eso por lo que he decidido aceptar únicamente papeles de protagonista en películas de acción y aventuras...


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Work space


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Detrás de cada trabajo existe un lugar donde se generó todo. Un espacio de trabajo convertido en una ramificación nerviosa más, una prolongación de la cabeza, hábitos, orden y desorden… Es un espacio personal, casi íntimo, donde no existe la lógica aplicada en el mundo exterior. Un lugar donde el orden es aplicado por el subconsciente y resulta complicado explicar porque las cosas están donde están o en que momento llegaron allí. 

Pero a pesar de todo nos sentimos cómodos, familiarizados con el entorno y nos volvemos conservadores con su disposición. Todo resulta estar bien donde está, y cualquier leve movimiento por un ajeno que altere este perfecto caos, es detectado con inmediatez y motivo de ira.

Siempre existe un objeto aparentemente intrascendente, pero de suma importancia. Situado de forma estratégica, funciona a modo de canalizador. Punto donde fijando la mirada uno se transporta a otro lugar, incluso a sí mismo, buscando una respuesta lejos de aquel espacio físico. 

Lo curioso de todo esto, es que como si de algo mágico se tratara, únicamente funciona con uno mismo y cualquier otra persona es incapaz de entenderlo.



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Venta de almas


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En el mercado había un tipo muy curioso, que vendía almas a precio de coste. Era obvio que la venta no se le daba muy bien, puesto que él siempre se había sentido comprador. Pero es que últimamente el infierno se ha convertido en un mal negocio.

FUMAR ES DE LOCOS!


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En una sala de teatro puedes gritar lo que te apetezca. He llegado a esta conclusión, después de leer todas las prohibiciones de este lugar. Debo confesar que he gritado menos que las personas del escenario, porque reconozco que me ha dado vergüenza. Pero aun así, me han invitado a abandonar la sala.

Sentado en la puerta del teatro, sin saber que hacer. Voy a fumar.

ROBOTS


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Mal presente que pregunta donde está el pasado. Pensamiento avanzado que decide retroceder, futuro limpio que tira de la cadena, estancamiento emocional y vieja  inspiración, demasiados antecedentes. 

No me gusta el hombre astronauta porque ya sé demasiadas cosas, pero si pudiera elegir, elegiría vivir. Me simplifico para ahorrar en utilidad y evoluciono hasta la máquina del tiempo: “Billete de ida, por favor”. Sólo espero poder acordarme de todo...